El comino tiene un sabor intenso y ligeramente amargo, con un olor fuerte y dulzón. Es muy común en la cocina árabe. Úsalo como condimento en pescado, sopas a base de garbanzo y habas, potajes de trigo, ragout de carne o callos llamados “Kamunía”. También es la especia principal en la ensalada de zanahorias. Para aumentar la intensidad del aroma, hay que calentar las semillas antes de su uso.